jueves, 9 de febrero de 2012

capitulo 24

Después de una cena más divertida, incluyendo risas de todos, nos fuimos temprano a dormir. Me metí en mi tienda junto a Alice, y ya con el pijama puesto, me acosté en mi parte.

-¿Crees que mañana será un día un poco más divertido? –Me preguntó ella, susurrando.
-Creo que sí. –Suspiré. –Tom parecía un poco más animado en la cena, ¿no crees?
-Sí. Pero aún se le notaba apagado.
-Lógico que lo esté. Pero intentará recuperarse pronto para divertirse aquí.

La castaña me dio la razón. Se dio la vuelta, dándome la espalda. Yo hice lo mismo, cerrando los ojos para intentar conciliar el sueño. Todo lo sucedido en aquel día se me vino a la mente.


Había pasado una semana y pocos días desde todo aquello que había sucedido. Tom había mejorado, pero aún se le notaba apagado, aunque su hoyuelo seguía apareciendo de vez en cuando. No habíamos vuelto a verles el pelo a Frankie y Pixie, y Danny prefería no comentar nada sobre su relación con ella, a nadie, siquiera a los chicos. A Giovanna, por lo menos, nosotras la seguíamos viendo, pero sin que Tom estuviera delante. Aún no estaba preparado.

-¿Cuánto queda para irse? –Me preguntó Alice, una noche cuando ya nos fuimos a acostar.
-Tres días. –Me quedé pensando. –Es increíble lo rápido que a pasado el tiempo, ¿eh?
-Sí que lo es. –Ella rió. –Ya me había acostumbrado a los mosquitos y bichos que hay aquí.
-Incluyendo a Melanie. –Rompimos a reír. –Pero Melanie parece haberse calmado un poco aquí.
-Sí, se controla más. –Alice bostezó, haciendo que yo también bostezara. –Creo que me voy a dormir ya.
-Sí, yo también. Buenas noches.



Un ruido de rama partida hizo que abriera de golpe los ojos a mitad noche. Me senté en el mismo sitio, escuchando al exterior. Solamente se oía en aquel momento a grillos y más grillos cantar. Me volvía a acostar, pero de nuevo un ruido mas fuerte hizo que me levantara. Alguien o algo habia chocado contra mi tienda, seguramente por torpeza. Me levanté y salí.
Miré a mi entorno, y de donde había provenido el ruido. Allí no había nada. Un miedo se apoderó de mí, y, mi piel se puso de gallina. Hacía un aire helado. No del toda convencida, comencé a caminar entre los arbustos. ¿Y si alguien me secuestraba y me violaba o algo parecido, como hacían en las películas de terror? Me paré en mi sitio, esperando a oír el mínimo ruido. Unos acordes de guitarra hicieron que mi oído se afinara y mis pies siguieran a las notas, hasta encontrarme a un chico de rulos a espalda mía. Era Danny.

-¿Danny? –El pecoso se levantó del suelo con su guitarra en la mano, asustado por mi presencia. –Lo siento… -Evité reír.
-¡Cady! –Susurró fuerte Danny, llevándose la mano a su pecho. -¡No me vuelvas a hacer eso en la vida! ¿Qué haces aquí?
-Digamos que eres bastante patoso y casi caes encima de mi tienda. –El se llevó la mano a la cabeza. –Y no eres del todo silencioso.
-Quería venir aquí solo para pensar, pero como estaba todo oscuro, he ido tropezándome con todo.
-Si quieres me voy. –Dije yo dando un paso hacía atrás.
-No, no tienes porque. No me molestas, además, hace una buena noche. –Se sentó de nuevo en el suelo, mientras yo me quedaba de pie, observándole. –Vamos, siéntate, no te voy a morder. –Y una sonrisa traviesa se dibujó en su cara. Yo levanté una ceja y acabé optando por hacerle caso.
-¿Qué tocabas?
-Una canción que estoy escribiendo, pero aún está algo cruda.
-¿Puedo oírla? –El levantó las cejas, no muy seguro.
-No está acabada, y no suena bastante bien.
-¿Y qué? Eres Danny Jones, seguro que sonará bien. –El sonrió, alagado.

Colocó su guitarra de nuevo y se esperó unos segundos antes de tocar.

-I think of yesterday and all the times I spent being lonely, I watched the young being young. While all the singers sung about the way I felt. –Arrugé el ceño confundida por la letra. Aparté los ojos de el, para pensar, pero pude notar que, el al seguir, me miró, con esos ojos azules que tenía. Me gustaba el ambiente. –The days are here again, when all the lights go down. What do they show me? The rules are all the same, it’s just a different game, -Me levantó una ceja y me sonrió. –To tell you how I feel. Although it seems so rare, I was always there. I can’t stop diggning the way you make me feel. –Terminó de cantar, mientras no apartaba la vista de mí. Me quedé boquiabierta. Algunas mariposas que llevaban años muerta en mi estómago resucitaron, poniendo mi piel de gallina y sin nada más que pensar salvo la canción que me acababa de cantar. El me miraba de una forma muy extraña. -¿Te a gustado?
-Sí, a estado muy… -Me mordí el labio sin saber que decir. –bien. Me encanta.
-Me he inspirado en una persona en especial…

Una rama sonó a nuestras espaldas, haciendo que el parara de hablar y el habiente “romántico” según mi cabeza se rompiera. Maldije a la persona o cosa que había pisado aquella rama, y, cerrando los ojos y girándome para ver quien había causado aquello, me encontré a una Melanie escurridiza, quien se había escondido detrás de un árbol.

-¿Melanie? –Dijo Danny en voz alta. Ella se volvió a asomar. -¿Qué haces aquí?

No hay comentarios:

Publicar un comentario